Kylian Mbappé se quedó solo contra el mundo en el Real Madrid-Mallorca y dio alas a los suyos con su gol en el minuto 68 para el que tuvo que sortear a toda la defensa bermellona. La resistencia de los de Arrasate se mantuvo imbatible durante más de una hora de partido, pero una nueva aparición estelar del francés dio un hilo de vida a los blancos, que no quieren entregar la Liga este miércoles en manos del Barcelona.
Mbappé recibió el enésimo pase en el área, esta vez procedente de Luka Modric. El francés se encontró con tres defensas a la vez y tras superar a los dos primeros golpeó como pudo con su gran bota derecha para batir a un bestial Leo Román, portero del Mallorca, por su palo. Así, el Real Madrid empató un encuentro que comenzó perdiendo en el 11′ con un gol de Valjent y consiguió aprovechar un asedio que impuso toda la segunda parte.
Todo empezó en los pies del croata, que sigue siendo imprescindible en este Real Madrid. Modric vio a Mbappé ligeramente desmarcado y en buena posición de tiro y no se lo pensó: balón al mejor del equipo. El ‘9’ volvió a ser trascendental al transformar en gol una de sus múltiples ocasiones. Y es que los de Carlo Ancelotti lo merecían como nunca en su partido más ofensivo de la temporada, en el que se plantó en una cifra desorbitada de saques de esquina.
Mbappé… y ¡Jacobo Ramón!
Ya en el descuento, Jacobo Ramón se convirtió en el héroe del Santiago Bernabéu al marcar el gol del triunfo con muchísima épica (2-1). Así, evitó que el Barça cantase el alirón sin necesidad de jugar su partido en Cornellá frente al Espanyol este jueves en un derbi catalán que adquiere todavía más emoción tras esta victoria de los blancos.